
(Buenos Aires, 9 de abril de 1934 – ).
Sobrenombre: “Chunchuna”.
Su padre, César Villafañe, fue militar, del arma de caballería. Descendiente de una familia norteña, era nieto del político conservador Benjamín Villafañe. Su madre fue Juana Marcos.
Su infancia transcurrió en distintas provincias por la profesión de su padre.
Instalados en Buenos Aires, estudió en el Colegio Sagrado Corazón de Almagro.
Sus padres se separaron en 1942.
Su madre se apodaba “Chonchona” (muñeca en italiano) y ella adoptó tempranamente el de “Chunchuna” porque recelaba de su nombre real. En oportunidades se hacía llamar Margarita.
Fue formada por su madre bajo una serie de ideas: la mujer tenía que estudiar, trabajar, ser autónoma económicamente y alejarse de la cocina.
Trabajaba en el Correo Central, mientras estudiaba arquitectura en la UBA.
Era prima de Mercedes “Pupele” Marcos, hija de César, el mítico dirigente peronista, con quien tenía cercanía y proximidad. Fue su hermana postiza. Según su testimonio, en la casa de su prima asistió a debates en los que participaban desde John W. Cooke a Arturo Jauretche.
En 1961 se casó con el músico Horacio Molina, con quien estuvo en pareja hasta 1971. Tuvieron dos hijas: Juana (1962) e Inés (1964).
Las primeras propagandas que realizó fueron para vinos Colón. Con el tiempo se asumió como profesional en el modelaje. Entre 1961 y 1969 fue la modelo más cotizada de la época. Con asistencia jurídica, fue la primera en exigir la firma de contrato para comenzar a trabajar. Protagonizó más de doscientos avisos publicitarios en gráfica y decenas de comerciales en televisión. Se caracterizaba por su voz insinuante, pómulos agudos y su pelo rubio, heredado de su abuela materna de origen gallego.
El 30 de agosto de 1967 participó de la creación de la Asociación de Modelos Argentinos, junto a Karin Pistarini, Ante Garmaz, Hugo Puiggrós y Claudia Sánchez, entre otros. Se trataba de un sindicato surgido para defender los derechos laborales de los afiliados, varones y mujeres. Había quienes desfilaban, quienes hacían publicidades y quienes realizaban fotos. El dúo Pedro y Pablo -Miguel Cantilo y Jorge Durietz- le dedicó una exitosa canción. La convocatoria inicial del gremio fue en una fiesta para recaudar fondos en la boîte Mau-Mau. Ese día Villafañe recibió a cada uno de los invitados con un cigarrillo y una copa, vistiendo una torera con incrustaciones que tejió al vestido.

En 1971 actuó en Los muchachos de antes no usaban gomina, con Lautaro Murúa.
Se acercó a la Villa Comunicaciones de Retiro, donde ejercía su trabajo pastoral el padre Carlos Mugica. De esa experiencia, recordaba: “comencé a ocuparme de procurar mejoras en las viviendas. Este proyecto, sin embargo, no llegó a buen término porque no conseguíamos los materiales que necesitábamos. Una de las pocas cosas que logré fue construir una habitación para Carlos, al lado de la nueva capilla que se estaba edificando. Era un cuarto pequeño, con las mínimas comodidades». Tras ese fracaso, Villafañe comenzó a ocuparse de acompañar a los enfermos a los hospitales públicos. La menor de sus hijas, Inés, hizo la preparación de la catequesis allí y tomó la comunión en la villa.
Viajó en el chárter de regreso de Perón al país, el 17 de noviembre de 1972.

En abril de 1974, por mediación de César Marcos, conoció a Fernando “Pino” Solanas en el estreno del El camino hacia la muerte del viejo reales de Gerardo Vallejos, otro de los miembros del Grupo Cine Liberación.
En 1975, estando junto a Solanas fueron amenazados de muerte, partiendo al exilio. Recalaron primero en Madrid y luego se establecieron en París. Sufrió las condiciones del desarraigo, lo que causó la separación de la pareja.
En 1983, declaraba: “A mí me prohibieron, ¿por qué? Pienso que por ser peronista”.
En 1985 participó en la película La historia oficial, junto a Norma Aleandro.
En 1990 formó pareja con Adolfo Juan Ángel “Chango” Lavarello, quien falleció en 2010.
Intervino en programas televisivos y actuaciones teatrales, resguardando su perfil. Trabaja reformando casas y diseñando jardines privados. Vive en una casa en Florida rodeada de plantas.
Referencias:
Hernández, Pablo J. Compañeros. Buenos Aires, Biblos, 1999.
Mejía, Virginia. Chunchuna, confesiones de un ícono pop. Buenos Aires, Metrópoli, 2024.
Darío Pulfer