El Frente Revolucionario peronista fue una organización política que desarrolló sus actividades desde mediados de los años sesenta, y comenzó a desintegrarse por la represión desde 1974.

            Surgió como un desprendimiento del Movimiento Revolucionario Peronista (M.R.P.) surgido en 1964. Durante ese año había avanzado el debate sobre la lucha armada y la falta de apoyo otorgado por el M.R.P. a las primeras Fuerzas Armadas Peronistas (FAP), en contraste con la energía que mostraba en la lucha interna contra el vandorismo. Esto provocó, en palabras de Armando Jaime, la fractura de la organización en tres grupos: uno dirigido por Gustavo Rearte (Juventud Revolucionaria Peronista y posteriormente el Movimiento Revolucionario Peronista 17 de Octubre en Buenos Aires), otro encabezado por Carlos Gaitány el Frente Revolucionario Peronista con militantes de Salta, Jujuy, Santiago del Estero entre otras provincias.

            No hay precisión acerca de la fecha en que se produce esa ruptura y se crea el FRP, pero con seguridad, ocurrió entre 1966 y 1967, mientras Armando Jaime, Juan Carlos Salomón y Justo José Suárez cumplían una condena por participar de las manifestaciones en contra de la presencia de los reyes de Bélgica en Salta. Allí decidieron separarse del MRP, formar el FRP, y más tarde el Ejército de Liberación del Norte (ELN, luego Ejército de Liberación Nacional).

            Algunos miembros de la organización en otras provincias fueron: Félix Serravalle (Santiago del Estero), José Loto (Termas de Río Hondo), hermanos Rivero (Rosario de Santa Fe), Aldo Bosarelli y Martín Federico (Córdoba), Hugo Andina Lizarraga (Tucumán), Juan Carlos Arroyo y Mario Díaz (Jujuy).

            El F.R.P. se planteaba como una organización de superficie orientada al trabajo político de masas. Contaba con un comité ejecutivo, y con la realización de congresos provinciales. Los dirigentes principales se conocían, pero el resto de la estructura, organizada en células de aproximadamente cinco personas, era clandestina. Por otro lado, se organizaron en “frentes” para la acción de masas en el ámbito barrial, estudiantil y rural.

            Carlos Holquist, militante de la organización, formaba parte del frente estudiantil que tuvo activa participación en los enfrentamientos sociales vividos en Salta en mayo de 1969.

            Mientras tanto el E.L.N. se encargaba de las acciones militares, subordinadas al trabajo político.Tuvo como jefes militares a Alfredo Mattioli (de la localidad salteña Rosario de Lerma), Juan Carlos Arroyo (Jujuy) y Ana María Mata (de Rosario de Santa Fe), entre otros. El E.L.N. contaba con setenta u ochenta militantes. Entre las acciones militares que realizaron, se registró la expropiación de explosivos de la fábrica de cemento Minetti de Salta en 1967, o el asalto a una comisaría de la localidad La Silleta para proveerse de armas. En 1971 en colaboración con el E.R.P., lograron fugar del penal de Villa Urquiza (Tucumán) algunos de los cuadros pertenecientes a ambas organizaciones, entre ellos, Mario Díaz y Juan Carlos Arroyo (E.L.N.) y Benito Uteaga (E.R.P.). El mismo año, el E.L.N. obtuvo una importante suma de dinero luego de una operación sobre los pagadores de sueldo del Ingenio Ledesma. Otra operación del mismo tipo fue realizada en mayo de 1972 donde se apropiaron de quince millones de pesos moneda nacional destinada al pago de salarios del personal del hospital Joaquín Castellanos en la localidad de General Güemes en Salta.

            No existen datos certeros más que los declarados por los propios protagonistas ya que las acciones militares, por una decisión política, no eran firmadas. Así es que la información aportada por terceros a partir de prensa escrita, es dudosa. Una particularidad es que muchas de ellas se hacían en colaboración con el P.R.T.-E.R.P..

            Elaboraron materiales de estudio y análisis de la sociedad argentina y salteña, volcados en la revista Cabecita Negra y Vocero Popular, además de documentos internos para militantes, con lo que completaron lo que constituye un verdadero programa político. En ellos se planteaban como objetivo la “liberación nacional y el socialismo”. Entendían que hacia mediados del siglo XX, la “contradicción principal” en Latinoamérica era entre “dependencia y liberación”, y dada la inexistencia de partidos revolucionarios de la clase obrera, los movimientos de liberación habían sido liderados por una burguesía nacional que, si bien habían cumplido su etapa, finalmente se había mostrado “incapaz” de avanzar hacia el socialismo, por eso insistían en la necesidad de que las masas logren una “dirección revolucionaria independiente de la burguesía” a fin de no quedar “entrampados en luchas interburguesas”.

             Para la organización, el sistema capitalista era el generador del imperialismo, por eso afirmaban: “pretender la liberación nacional dentro del capitalismo implica una utopía imposible de realizar”. Definían a la Argentina como un país capitalista dependiente y controlado por monopolios, donde la “contradicción principal” se daba entre la burguesía monopolista – imperialista y sus aliados (burguesía nativa, burocracia militar, política, sindical), y la clase obrera y sus aliados (campesinos, capas populares, sectores medios bajos).

            Definían al peronismo como un “movimiento policlasista donde se reproducía la lucha de clases”. De ahí su adhesión al mismo, ya que consideraban que los obreros que lo integraban “empujan y exigen” a los sectores burgueses y burocráticos de su dirección hacia “definiciones revolucionarias”. Además, adherían al peronismo en tanto, según palabras de Armando Jaime en entrevistas, “era fundamental tener en cuenta la subjetividad de la masa obrera y popular (…) había que sentarse con los compañeros y explicarles cuál era la situación del peronismo para ir creando tendencias de izquierda dentro del peronismo”. Se autodefinían como “peronismo revolucionario”.

            A diferencia de Montoneros, el F.R.P. decía sustentar una posición autónoma frente a Perón, por eso la distancia mantenida entre ambas organizaciones a lo largo de sus años de existencia. Según Jaime: “hablaban de la Tercera Posición, del socialismo nacional, era todo una cosa muy difusa. Sobre todo porque ellos se planteaban como antiimperialistas y nosotros planteábamos antiimperialismo y socialismo”. Además, la experiencia de la visita a China a mediados de los años sesenta y las lecturas de Giap, Ho Chi Min y Mao Tse Tung, determinarían su interés por el proletariado rural y campesino como potenciales aliados, que no era el caso de JP – Montoneros salteños.

            Si bien el F.R.P.– E.L.N. se organizó como guerrilla urbana,  su objetivo era llegar al campo: “pensábamos que eso tenía que ser cuando se dieran ciertas condiciones, había que meter bastante gente, abrir más de un frente y tener buena movilidad”.

            En cambio, su orientación lo acercaba a organizaciones de izquierda revolucionaria como el Partido Revolucionario de los Trabajadores – Ejército Guerrillero del Pueblo (P.R.T. – E.R.P.), con quien compartía la preocupación y necesidad de existencia de un partido revolucionario y un ejército. Sin embargo, las entrevistas revelan que también surgirían diferencias con aquella organización debido a que, según Jaime, el P.R.T. pretendía “tomar ese lugar de vanguardia” (partido), mientras que el F.R.P. creía que esa vanguardia debía ser construida. Aún así, a mediados de 1973, siguiendo su política frentista, concertaron acuerdos con el P.R.T. para la conformación del Frente Antiimperialista por el Socialismo.

            Desde fines de 1973, sus militantes comenzaron a sufrir la persecución y represión tanto en Salta como en otras provincias. Además de soportar allanamientos en la provincia, en octubre Ángel Hugo Puggioni, organizador del E.L.N., fue encarcelado en Buenos Aires, y un año después fue asesinado. En 1974 la persecución se intensificó, y la mayoría pasó a la clandestinidad y más tarde al exilio.

Fuentes:

Entrevista a Armando Jaime, 21 de marzo de 2008, Duración de la entrevista: 46 minutos. En Archivo de la Palabra. Universidad Nacional de Salta. Proyecto de Investigación CIUNSa N° 1804

Bufano, Sergio y Rot, Gabriel (Dir.) (2005). “Entrevista a Armando Jaime”. En Revista Lucha Armada. Año 1. Nº 3. Capital Federal: Nueno Offset. Bufano, Sergio y Rot, Gabriel (Dir.) (2005). “Entrevista a un miembro del Ejército de Liberación Nacional”. En Revista Lucha Armada. Año 1. Nº 3. Capital Federal: Nueno Offset.

Referencias:

Raimundo, Marcelo, “Acerca de los orígenes del peronismo revolucionario”. En: Historia Política.com

Correa, Rubén, Holmquist, Carlos (2011). “Estudio sobre el peronismo revolucionario: el FRP en Salta, 1972-1975”. Ponencia presentada en X Jornadas Interescuelas de Historia. “Documento interno del FRP a sus militantes”. Disponible en: eltopoblindado.com Vocero popular, Nº 36. Diciembre de 1973.

Alejandra Soler