Por un comentario lateral de Arturo Peña Lillo conocemos que  tras la asunción de Frondizi, las “playas” de la reventa de libros fueron inundados de textos de origen peronista. De ese modo, poco después, esos títulos “cubrieron los quioscos de diarios y revistas”.

            Peña Lillo señaló que “estos libros habían sido impresos en cantidades inusuales –entre 50 y 100.000 ejemplares- de manera secreta y almacenados  a la espera de la fecha que se hicieran cargo las autoridades legítimamente consagradas”. El éxito fue inmediato: las “reimpresiones se sucedían semana a semana”.

            El editor afirmó que se dio un “acontecimiento inédito”: la publicación de los libros que Juan Perón escribiera en el destierro. En su descripción mencionaba los títulos “Los vendepatria” y “La fuerza es el derecho de las bestias”. A ello agregó la salida de “algunos folletos de dudosa autenticidad”.

            Peña agregó que el distribuidor Hércules Di Césare fue el más beneficiado,  quien guardaba el dinero “en la parte trasera del automóvil usado para trasladarse”, ya que no le entraba en los bolsillos.

            Esta referencia del editor nos lleva a establecer una serie de preguntas: ¿cómo era el contexto de desenvolvimiento del peronismo en el territorio para ese momento? ¿quién promovió la edición? ¿cuáles fueron los títulos publicados? ¿respondía a motivaciones políticas más profundas o se trataba de intereses exclusivamente crematísticos?

            Para esa época funcionaba en el país el Comando Táctico Peronista. Si bien esa instancia estaba conformada por cerca de cien personas, la figura más destacada en ese momento era Alberto Rocamora. El lugar de funcionamiento del Comando, en un primer momento, fue el departamento de John W. Cooke en Avenida Santa Fe 1183.

Es probable que en este espacio se haya fraguado el plan de edición masiva de los libros de Perón y uno alusivo a Eva Perón, concomitantemente con la organización de las manifestaciones del día de la asunción de Frondizi.

Los libros salieron en ediciones clandestinas, sin pie de imprenta. Si bien La fuerza es el derecho de las bestias, había tenido otras ediciones locales clandestinas, ninguna había alcanzado las tiradas de esta. Los libros, con un precio de tapa accesible,  buscaba llegar a un público que había tenido vedada estas lecturas hasta el momento.

La importancia otorgada a la difusión de estos materiales hay que inscribirla en el lugar otorgado a la palabra escrita en las prácticas de la resistencia peronista, que se había manifestado durante todo este período mediante la salida de hojas volanteras (El lidercito, Abanderada por ejemplo), periodicuchos (El guerrillero, Pero…que dice el pueblo entre otros) o publicaciones de mayor estructura (Rebeldía, Palabra Argentina, Norte o Línea Dura).

Por lo que hemos podido reconstruir, en base al tipo de edición, los títulos publicados de Perón fueron: La fuerza es el derecho de las bestias y La realidad de un año de tiranía.

A ello se sumó un título dedicado a la trayectoria de Eva Perón de John Lack. Este material había sido publicado en 1950 en Madrid, en la serie “Celebridades” de la editorial Dólar. Se trataba de una serie orientada a compilar biografías noveladas y de aventuras. Los colores diferentes en las tapas, podemos inferir, respondían a distintas tiradas.

Otro era el folleto Al caer Perón: un pueblo feliz; al salir Aramburu, un país en ruinas. Es probable que a este libro se refiera Peña Lillo al hablar “algunos folletos de dudosa autenticidad”.

            Si bien el libro Los vendepatria. La prueba de una traición, había sido impreso en los talleres de Tipografía Vargas de Caracas y por Editorial Atlas a fines de 1957 no formó parte de este lote de impresos de difusión popular. Quién se ocupó de una edición local del mismo fue el periódico Línea Dura, Órgano oficial del Movimiento Peronista, dirigido por María Granata bajo la orientación política de John W. Cooke.

Capítulos de ese libro fueron editados por Palabra Obrera, en fascículo independiente.

Esta iniciativa de difusión de libros de Perón corría en paralelo con el vigor que adquirían algunas publicaciones ligadas al peronismo (Palabra Argentina, Línea Dura y Norte) (El Grasita, El Soberano, entre otros).

Referencias:

Anónimo. Al caer Perón: un pueblo feliz; al salir Aramburu: un país en ruinas. Buenos Aires, s d, 1958.

Chávez, Fermín. Prólogo a Perón, Juan D. Los libros del exilio. Buenos Aires, Corregidor, 1996.

Lack, John. Eva Perón. Madrid, Celebridades, 1950.

Peña Lillo, Arturo. Memorias de papel. Buenos Aires, Galerna, 1988.   

Perón, Juan D. La fuerza es el derecho de las bestias. Buenos Aires, s d, 1958.

Perón, Juan D. La realidad de un año de tiranía. Buenos Aires, s d, 1958.

Perón, Juan D. Los vendepatria. Buenos Aires, Línea Dura, 1958.

Darío Pulfer