(Cerrillos, Provincia de Salta, 29 de septiembre de 1910- Cerrillos, Provincia de Salta, 29 de diciembre de 1985).
José Armando Caro nació en Salta el 29 de septiembre de 1910. Su padre, de antigua familia criolla, cursó la Escuela Normal y ejerció magisterio. Su madre, Marianna Santoro nació en Forino, provincia de Avellino y a los once años se radicó en Salta.
Cursó estudios primarios en la escuela Urquiza y en la Normal de Maestros y el secundario en el Colegio Nacional de Salta. En 1930 fue secretario del Centro de Estudiantes Secundarios de Salta.
Desde 1938 hasta 1942, cursó la carrera de abogacía en la Facultad de Derecho de la Universidad Nacional de La Plata. Cursó posgrado en el Instituto de Altos Estudios Jurídicos de esa Facultad, bajo dirección del jurista español Luis Jiménez de Asúa. Se desempeñó como delegado estudiantil ante el Consejo Académico de la Facultad de Derecho de esa Universidad. Presidió la Federación Universitaria de La Plata. En su gestión auspició y dirigió la publicación de la segunda edición de la obra de Gabriel del Mazo “La Reforma Universitaria”.
En 1939 fue delegado a la Primera Convención Nacional de Estudiantes. En el periodo 1941-1942 perteneció a la Unión Universitaria Intransigente UUI. El triunfo de esa Agrupación lo llevó a presidir el Centro de Estudiantes de Derecho, acompañaron su lista José María Guido (presidente de la Nación 1962-1963), Miguel López Francés, Francisco Capelli, John William Cooke, René Orsi y Leopoldo Bravo
Fue presidente de la Federación Universitaria de La Plata, delegado a la Federación Universitaria Argentina y presidente del Cabildo Abierto contra el fraude. Dirigió el periódico “Renovación” órgano de la Federación Universitaria de La Plata. Obtuvo el título de Escribano Público Nacional. Se graduó de abogado el 15 de septiembre de 1942, cuando Alfredo Palacios era presidente de esa Universidad.
Durante sus estudios en La Plata dictó conferencias en esa ciudad y en Capital Federal. Algunos de los temas de esas disertaciones: “Humanismo y técnica”; “Antinomia federalismo – unidad nacional”; “Exégesis crítica al proyecto de Ley Universitaria de Julio V. González: “Puntos de vista para la interpretación histórico –cultural de la Reforma Universitaria”, y, en un ciclo organizado por la FUA “La Universidad como ensayo de gobierno funcional: esquema teórico y valoración de sus resultados”.
En 1943 se casó con María Elena Figueroa. Tuvieron ocho hijos: José Armando, Raúl Eduardo, Gregorio Abelardo, Ramiro Fernando, María Elena, María Isabel, Luis Alberto y Rodrigo Alejandro.
Entre 1943-1944 fue delegado por el distrito Salta ante la Convención Nacional de la Unión Cívica Radical y miembro de la Comisión Política de ese organismo. Al igual que otros radicales yrigoyenistas de Salta, como Juan Carlos Cornejo Linares, se incorporó al peronismo en 1945.
Desde 1944 hasta 1947 fue asesor letrado de la seccional Salta de Ferrocarriles, después lo fue de la Policía de la Provincia de Salta pasando desempeñarse como secretario general y mas tarde jefe de ese organismo. En 1949 es designado ministro de Gobierno de Salta durante la gestión del gobernador Emilio Espelta. A partir de 1945 fue profesor de Derecho Penal y Procesal en la escuela de Policía “Franklin D. Roosevelt”; de asignaturas jurídicas en colegios nacionales secundarios; de Historia e Instrucción Cívica; legislación del trabajo en varios sindicatos y en la CGT Salta.
Fue delegado al II Congreso Nacional de Ciencias Procesales (Salta, 1948); delegado al II Congreso del Congreso de Planificación Regional del Noroeste argentino (PINOA).
Fue uno de los pioneros de la radio afición, de la radio difusión y del primer canal de televisión en Salta. En 1923, cuando tenía 13 años, se inició como radio aficionado. En 1935 fue vocal del Radio Club Córdoba. Desde 1948 hasta 1951 fue director técnico ad honorem de LV9 Radio Provincia de Salta.
En 1948 instaló en Salta, a su costa, los equipos radiotécnicos del Distrito 18° de Correos y Telecomunicaciones. Fue secretario de la Primera Convención de Radioaficionados y miembro de las bases orgánicas de la Federación Argentina de Radioaficionados (F.A.R.A) y presidente de esa Federación. Fue socio del Radio Club Argentino, miembro del Centro de Radio Veteranos y miembro de la American Radio Reay League (ARRL).
Su trayectoria parlamentaria comenzó cuando fuera electo Senador provincial por el Departamento de Iruya (Salta) y elegido por sus pares presidente del Bloque peronista.
Desde mayo de 1948 hasta junio de 1949. Ese año fue Convencional Constituyente Electivo, miembro de la Asamblea Legislativa Reformadora de la Constitución Provincial presidente de la Comisión Redactora y miembro informante del proyecto de reforma.
Durante el periodo 1950-1952 presidió el Bloque de diputados peronistas y ejerció la presidencia de la Cámara de Diputados de la Provincia. Fue reelecto diputado provincial para el periodo 1952—1956, que no concluyo al ser electo en los comicios del 25 de abril de 1954, senador de la Nación para el periodo 1955-1961. En esas elecciones obtuvo el 78,8% de los votos, el más alto porcentaje en la historia electoral de Salta.
En el periodo 1953-1954 fue secretario de la Junta Departamental de la Capital del Partido Peronista y secretario general y delegado ante la Consultiva Nacional del Partido Peronista (1954-1955). Desde 1956 presidió la Junta Promotora Provincial y delegado ante la Junta Nacional del proscripto Partido Justicialista.
En febrero de 1955, el presidente Juan Domingo Perón lo designó interventor federal en Santiago del Estero. Asumió esas funciones el 4 de marzo de 1955.
Llevó de Salta su automóvil Ford V8 modelo 1936 y chofer personal. No ocupó la residencia oficial, alquiló un pequeño departamento para residir en él cin su familia. Producida la sublevación militar que derrocó al gobierno y forzó el exilio de Perón, permaneció en casa de gobierno, todos los días y sin abandonar su despacho. El 22 de septiembre entregó el gobierno e íntegros los fondos reservados a jefes militares.
Una semana después, regresó a su domicilio en Salta. Al día siguiente envió un telegrama con este texto al presidente provisional, general Eduardo Lonardi: “Me encuentro en la Ciudad de Salta, en mi domicilio calle Deán Funes 418, dispuesto a asumir las responsabilidades que me cupieren por mi actuación pública y privada”.
Desde octubre de 1955 y hasta 1958 fue varias veces detenido. La justicia de Santiago del Estero lo absolvió de todas las acusaciones, incluidas la de un supuesto “enriquecimiento ilícito”. Concluyó esa etapa de su actuación pública más pobre que al inicio de su actuación pública.
En 1958, fue miembro del Comando Táctico Nacional. Por ese tiempo ejerció el periodismo político en el periódico “Lealtad”, órgano de la resistencia peronista dirigido por Juan Carlos Cornejo Linares. Desde 1958 hasta 1962 fue miembro de la Junta Promotora Nacional del Partido Justicialista, llegando a ejercer su presidencia. Formó parte del Consejo Superior del Movimiento Peronista.
En enero de 1962, en asamblea del Partido Justicialista salteño, se proclamó la fórmula J. Armando Caro – Miguel Ragone como candidatos a gobernador y vicegobernador, postulaciones a las que renunciaron para preservar la unidad partidaria.
En los anulados comicios del 18 de marzo de 1962 fue electo diputado nacional en la lista del Partido Laborista Nacional, nombre que reemplazó al de Partido Justicialista, cuyo uso estaba prohibido en todo el país. En esas mismas elecciones fue electo senador provincial por el departamento de Metán, cargo que declinó para asumir la banca de diputado nacional.
En la frustrada sesión preparatoria para la jura e incorporación de los electos, con luces apagadas y sin sonido, le tocó el honor de ser la primera voz justicialista que se escuchó en ese recinto luego de 1955. Después, los diputados peronistas electos deliberaron en periódico “Compañero” que dirigió Mario Valotta.
En las elecciones nacionales del 7 de julio de 1963 fue electo diputado nacional, con mandato hasta 1967, interrumpido por el golpe de Estado de junio de 1966.
Integró el Bloque de Movimiento Populares Provinciales, presidió la Comisión de Legislación Penal y fue miembro fundador del Parlamento Latinoamericano y en esa condición participó de su primera reunión que se efectuó el 18 de jul io de 1965 en Lima, presidida por un condiscípulo y amigo el político peruano Andrés Townsed Ezcurra, dirigente del APRA y amigo de Haya de la Torre.
El 15 abril de 1971 por resolución 9/71, fue designado delegado reorganizador del Movimiento Nacional Justicialista en Salta. Lo fue durante la gestión de Jorge Daniel Paladino como delegado de Perón, decisión ratificada por Perón cuando designó a Héctor Cámpora en reemplazo de Paladino. Su gestión comenzó con una declaración de principios y un acto público inaugurando la sede del Partido Justicialista.
En las elecciones de marzo fue electo senador nacional por Salta. En el Senado presidió la Comisión de Comunicaciones y Transportes y fue secretario de la Comisión de Defensa Nacional. Desde 1973 hasta 1983 fue Congresal Nacional del Partido Justicialista y desde 1975 hasta mediados de 1983 presidió el Tribunal de Disciplina del Partido Justicialista nacional.
En las elecciones nacionales del 23 de septiembre de 1973, cuando triunfó la fórmula Perón- Isabel Martínez de Perón fue designado por el Consejo Superior del Movimiento Justicialista como Delegado Electoral en la provincia de San Juan.
Como senador nacional en 1974 fue invitado a la reunión de la Unión Postal Universal realizada en Lausana (Suiza). En 1975 fue delegado al Parlamento Latinoamericano que sesionó en Caracas. Ese mismo año asistió como delegado argentino a la reunión de la Unión Interparlamentaria Mundial realizada en Colombo, Sry Lanka.
Como titular del Tribunal de Disciplina del Partido Justicialista Nacional, elaboró el dictamen que fundamentó la expulsión de Victorio Calabró, gobernador de la Provincia de Buenos Aires quien, antes del golpe del 24 de marzo de 1976, expresó su apoyo a esa medida. También en ese Tribunal de Disciplina inició trámites para la expulsión del PJ de José López Rega.
Durante el “proceso” condenó públicamente, junto a un puñado de dirigentes justicialistas, la represión ilegal del terrorismo de Estado, una de cuyas víctimas fue el ex gobernador de Salta, Miguel Ragone. Rechazó, también, las acciones de la denominada “contraofensiva”, condenando ese accionar que se proponía desplazar la acción política con el ejercicio de la violencia.
En 1982 criticó la operación militar en las Islas Malvinas.
En 1982 formó parte del Movimiento de Unidad, Solidaridad y Organización dentro del justicialismo, que lideraba Antonio Cafiero.
En 1984 fue miembro de la Comisión Asesora Política del Comando Superior del Movimiento Nacional Justicialista, creada por Isabel Martínez de Perón.
Expresó su apoyo al enjuiciamiento de las conducciones de los gobiernos militares y de los grupos armados.
Apoyó la consulta para la ratificación del acuerdo diplomático con Chile por el Canal de Beagle, con la firma del Tratado de Paz y Amistad.
Su última actuación pública fue en febrero de 1985, cuando participó y presentó un documento crítico en el congreso nacional del Partido Justicialista de Río Hondo.
El 30 de diciembre de 1985, al día siguiente de su muerte, en su última sesión del año la Cámara de Diputados de Salta, por iniciativa del diputado Fernando Chamorro, de la Unión Cívica Radical, se rindió homenaje a su memoria, proponiendo que se impusiera el nombre de “José Armando Caro” a la Biblioteca de la Legislatura de Salta. Iniciativa que, por mayoría, aprobaron Diputados y el Senado. Su familia, conserva y administra en Cerrillos (Salta) una importante biblioteca privada que lleva su nombre.
Fuentes:
Biblioteca Privada “José A. Caro”.
Gregorio Caro Figueroa