Fue un periódico de filiación peronista publicado en la ciudad de Rosario entre diciembre de 1956 y mayo de 1958. A la cabeza de este emprendimiento estuvo Nora Lagos, quien había sido directora del diario La Capital, entre 1953 y 1955, y de un pequeño diario peronista llamado La Argentina, justa, libre y soberana, del cual salieron sólo ocho números en diciembre de 1955. El mismo fue censurado y su directora encarcelada.

            Soberanía estuvo compuesto por un staff integrado por René Bertelli, Juan Puigbó Bernardo Iturraspe, Fausto Eduardo López y Luis Sobrino Aranda. Los tres últimos habían trabajado en el diario La Capital, y en el caso Sobrino Aranda también en La Argentina. Su tirada era semanal, con algunos números de tirada irregular. Tenía cuatro páginas en blanco y negro, cuyo tamaño osciló entre 42 x 58 cm y 30 x 40 cm. El periódico no ofrece datos sobre su tirada y no se dispone de la cantidad exacta de números publicados, pero fueron más de cuarenta. Se distribuía en Rosario, Santa Fe, en el interior de la provincia homónima, en Córdoba, Entre Ríos, Buenos Aires y el Chaco, según se desprende de sus páginas.

            Soberanía fue un periódico de contenido netamente político. Además de las críticas al gobierno de la Revolución Libertadora, el eje de los debates se articuló en torno a la estrategia que debía seguir el peronismo para el retorno al poder ante hechos concretos como las elecciones constituyentes celebradas en julio de 1957, las elecciones presidenciales de febrero de 1958 y las posturas a tomar frente al gobierno de Arturo Frondizi. En sus páginas se observan críticas contra los políticos que impulsaron acuerdos entre el peronismo y la UCRI, tal el caso de Arturo Jauretche en el contexto de las elecciones a constituyentes de 1957, y de John William Cooke y la estructura por él creada, el Comando Táctico, en el marco de las elecciones de febrero de 1958 que llevaron a Frondizi a la presiden de la nación. También se opuso a los dirigentes peronistas que presentaron sus propias candidaturas a través de partidos neoperonistas, como el ex ministro de Relaciones Exteriores Atilio Bramuglia, líder de la Unión Popular, y el ex senador Vicente Saadi, creador del Partido Populista. En ambas instancias electorales Soberanía defendió el voto en blanco, y en la segunda sostuvo la idea de falsedad de la orden de Perón de votar por Frondizi. Contó con una sección gremial y condenó la intervención de la CGT y de los sindicatos que tuvo lugar durante el gobierno de la Revolución Libertadora, pero también criticó a las 62 Organizaciones por impulsar el pacto Perón-Frondizi, reclamándole a sus sindicatos que pusieran el mismo empeño que habían puesto en el acuerdo, en exigirle candidato de la UCRI el levantamiento de la proscripción que pesaba sobre el partido y la posibilidad del retorno de Perón.

            El periódico se financiaba mediante la venta, su valor era de 1.50 pesos, y contó con la colaboración de los vecinos de Rosario, a través de donativos en trabajo, especie y dinero. También tuvo publicidad de pequeños locales de Rosario. Su realización implicaba un intercambio permanente con vecinos y lectores, a quienes se agradecía desde sus páginas, se les incitaba a la militancia y se les convocaba a actuar como corresponsales, enviando noticias y artículos. 

            Las mujeres, aunque de manera acotada, fueron interpeladas desde las páginas de Soberanía, a través de una sección titulada “La Mujer y la Patria”. Un artículo del 14 de enero de 1957 hacía referencia a la omisión de las problemáticas femeninas en la prensa, no sólo en los grandes medios gráficos leales al gobierno de la Revolución libertadora sino también en los pequeños periódicos de oposición; es decir, los de tendencia peronista. Las mujeres fueron reconocidas como militantes, y pese a valorarse el rol de la ley 13010 de derechos políticos femeninos sancionada durante el gobierno peronista, se aclaraba que en el nuevo contexto la participación política excedía a la acción de sufragar e implicaba  la lucha confrontativa. Aun así, se cuestionó la decisión del gobierno de Pedro Aramburu e Isaac Rojas de disolver el Partido Peronista Femenino, en tanto que había cercenado la capacidad de las mujeres de militar y organizarse masivamente.

            Las convocadas fueron las trabajadoras y las amas de casa, “las mujeres del pueblo”. Esta convocatoria tuvo algunas respuestas. Algunas cartas de lectoras reconocieron la posibilidad que se les abría desde el periódico para plantear sus problemas vinculados a las  dificultades económicas que debían afrontar  a raíz de la pérdida de empleo de sus maridos por su adscripción al peronismo, y la ausencia de voz entre las mujeres para decidir sobre las reformas que estaban introduciéndose en las fábricas tendientes a racionalizar el proceso productivo. A pesar de la intención inicial de otorgarle un espacio a las problemáticas femeninas, dicho objetivo quedó en el camino, acotado a tan sólo cuatro artículos, y eclipsada por el carácter popular y obrero que se pretendía otorgarle a la publicación a través de sus estrategias discursivas y por las problemáticas coyunturales que afectaban al peronismo.

            Otras secciones del periódico fueron, “Nuestra Bruja Predice”, firmado por Pamela, que presentaba un diálogo irónico entre los miembros de la redacción, cuyos nombres imaginarios hacían referencia a personajes y entidades políticas: Depuesta, que encarnaba al régimen peronista, Juanita, en alusión a Perón, y Jijima, que era del “Prepopuesto”, en referencia al gobierno de la Revolución Libertadora. “De donde Venimos,… A Donde Vamos…”, firmada por EL Chacho, recuperaba acontecimientos históricos;  en “Escribe el pueblo”, se publicaban las cartas de lectores y en “La Opinión Nacional”, se reproducía fragmentos de otras publicaciones.

            Soberanía se imprimía en la imprenta de Duchaim, una imprenta profesional de Rosario. En su portada figuraba el nombre de Nora Lagos como directora, el número de propiedad intelectual y la dirección de redacción, que se correspondía con el domicilio de residencia de Lagos, Maipú 1679, y un número de teléfono. En algunos números  el nombre de Sobrino Aranda figuró como propietario.

            El periódico sufrió la censura y la persecución, condición que compartió con otros medios opositores de la época. Desde sus páginas se denunció la incautación de los números cuando ya estaban en circulación, con el objetivo de desfinanciar los emprendimientos editoriales. La aplicación del decreto 4161, emitido por el gobierno de la Revolución Libertadora, que prohibía el uso de imágenes, términos y símbolos peronistas, fue una de las medidas aplicadas contra Soberanía y los miembros de su staff. En mayo de 1957 Nora Lagos fue detenida por infracción a ese decreto.

            El periódico continuó publicándose a cargo de Luis Sobrino Aranda, hasta fines de julio en que se desvinculó del emprendimiento y comenzó a aparecer el nombre de Fausto Eduardo López como editor; rol que hasta ese momento había cumplido René Bertelli, pareja de Nora, quien se encontraba detenido junto a ella en una comisaría en la localidad bonaerense de San Justo. Desde el periódico se denunció la detención de su directora y la persecución sufrida por periodistas. El día 21 de mayo, la sección escrita por ella, “Nuestra bruja predice”, apareció en blanco, sólo con el logo que la identificaba, una bruja, y un recuadro que comunicaba la solidaridad de los compañeros del periódico. El titular sostenía: “Pídese proceso a Nora Lagos”, mientras que un artículo de la portada se titulaba “No violó el 4161 que se le imputa”. En ese artículo se informaba que las causas del arresto se debían a la publicación, en el número 15, del 7 de mayo de 1957, de una imagen del velatorio de Eva Perón en la que podía apreciarse, además de la presencia de Juan D. Perón, la del entonces presidente de la nación Pedro E. Aramburu. En el número del 22 de julio de 1957 se denunciaba la existencia de presos políticos pese a que el 29 de junio había sido levantado el estado de sitio porque el gobierno había convocado a elecciones constituyentes para el día 28 de julio. Otro artículo del mismo número cuestionaba la invención de causas a periodistas iniciadas con posterioridad a las detenciones; como era el caso de Nora Lagos, a quien se le había armado una causa por enriquecimiento ilícito. También se publicaron dos cartas de la directora, una enviada desde la comisaría en la cual se encontraba detenida, y otra, desde un lugar oculto, antes de partir para el exilio a Paraguay, junto a Bertelli y las dos hijas de Lagos fruto de su matrimonio con el guionista cinematográfico Hugo Mac Dougall de quien se había separado en 1956. En esas cartas se convocaba a los lectores a mantener la lucha que ella no podía realizar por estar encarcelada y luego, prófuga. A partir del número 34, del 4 de noviembre de 1957, aparecer junto al de Sobrino Aranda o el de López. Ello coincide con el momento del anuncio de la convocatoria a elecciones presidenciales por parte del gobierno de la Revolución Libertadora y se considera que también con su retorno al país. Se desconocen cuáles fueron las causas del cierre de la publicación.

Referencias:

Capobianco, Carina.“Reconstrucción de un discurso peronista durante los años de la revolución libertadora: lectura interpretativa de publicaciones rosarinas”, Rosario, mimeo, 2003.

Carman, Facundo.El poder la palabra escrita: revistas y periódicos argentinos, 1955-1976, Buenos Aires, Biblioteca Nacional, 2015.

Ehrlich, Laura. “Rebeldes, intransigentes y duros en el activismo peronista, 1955-1962”, tesis de Maestría, Universidad Nacional de General Sarmiento, Instituto de Desarrollo Económico y Social, 2010

Gorza, Anabella. “Mujeres, política y periodismo en la Argentina de los años cincuenta. La Resistencia peronista a través de los periódicos Línea Dura y Soberanía” en Revista EstudiosN° 24 de la Escuela de Estudios Generales de la Universidad de Costa Rica, 2011.

Gorza,Anabella. “La militancia femenina en la Resistencia peronista a través de la prensa opositora (1955-1958). Nora Lagos y los periódicos La Argentina y Soberanía” en Revista de Historia Americana y Argentina. Instituto de Historia Americana y Argentina. Facultad de Filosofía y Letras. Universidad Nacional de Cuyo, 2016

Anabella Gorza