CARRIZO, Julio Ulderico. (Córdoba, 1936 – España, s/d).

            Alias: “El Manco”.

            Vivía en la ciudad de Córdoba. Su padre, Ulderico María, era inspector de bibliotecas.

Hacia 1956, Carrizo estudiaba en la Escuela técnica y trabajaba en la Fábrica Militar de Aviones.

            Por esa época se enroló en la resistencia peronista cordobesa.

            Sus primeras acciones resultaban inocentes: imprimían panfletos y armaron un sello para intervenir las monedas con el PV.

            En conocimiento de la visita del Vicepresidente Isaac Rojas a Córdoba el 22 de junio de 1957, el sindicalista Alejo Simó organizó una operación para llamar la atención durante el desarrollo del acto. Al grupo de Carrizo le entregó explosivos y unas balas de Gloster para la ocasión.

Carrizo guardó una bomba con la intención de colocarla en el Correo, aprovechando el momento en que Rojas hiciera uso de la palabra. Eran las 20,25, hora simbólica para la militancia peronista. Carrizo salió del bar Wimpy para cruzar la avenida Colón en dirección al Correo. Sorteó una valla de caballos de la montada, llevando en su mano izquierda, oculto bajo su abrigo “piel de camello”, medio cartucho de dinamita, cuya mecha encendió en el baño del bar.

Según testimonio del propio Carrizo: “Bajo a la calle camino un par de metros y bummm la explosión. Caigo, veo todo negro. Atontado grito ‘terroristas, terroristas’. ‘Tranquilo pibe’ me dice el policía. Entre dos me levantan, y me llevan al Hospital de Urgencias. Los médicos creen que tal vez se puede salvar la mano, pero el interventor militar del hospital ordena amputar. ‘Así aprenden’ habría dicho”.

Carrizo fue detenido. El juez Joubin ordenó el procesamiento y la prisión preventiva de Carrizo y un grupo de militantes.

Pronto recuperó la libertad por el hecho de no contar con antecedentes penales y por su corta edad.

Estos hechos no lo amilanaron.

Siguió formando parte de los comandos de la resistencia cordobesa, por lo que fue apresado nuevamente en la redada de 1960.

En ese momento fue condenado a 9 meses de prisión efectiva en el marco de las leyes represivas del Plan Conintes.

Luego junto a otros militantes peronistas fue invitado a Cuba para conocer esa experiencia. Allí tomó contacto con John W. Cooke y a Ernesto “Che” Guevara.

Volvió al país y siguió luchando por el retorno de Perón.

Fuentes:

Duzdevich, Aldo. Una bomba para el Almirante Rojas y la mano izquierda amputada: historias olvidadas de la resistencia peronista. En Infobae. 23 de mayo de 2021.

Referencias:

Baschetti, Roberto. Julio Carrizo. Disponible en: https://robertobaschetti.com/carrizo-ulderico-julio/

Melon Pirro, Julio. La Resistencia Peronista. Mar del Plata, Eudem, 2018).

Julio Melon Pirro – Darío Pulfer