Esta publicación tuvo varias etapas en su despliegue.
La primera salida fue entre agosto de 1960 y junio de 1962. La segunda etapa comprendió entre diciembre de 1963 y febrero de 1966). La tercera época corresponde al año 1973 y ya no corresponde estrictamente a la Juventud Peronista sino a la organización Guardia de Hierro y excede el período bajo estudio.
En su primera manifestación se trató de un boletín editado por el Comando de Prensa y Propaganda de la Mesa Ejecutiva de la Juventud Peronista de la Capital Federal y Gran Buenos Aires.
Con una tirada inicial de 500 ejemplares, su carácter precario y artesanal estuvo asociado a una publicación de 14 páginas realizada en mimeógrafo en hoja oficio, doblada como un librillo. Fue impreso en la Asociación de Empleados de Farmacia.
Fue realizado en condiciones de semiclandestinidad agravadas por las persecuciones y detenciones de los miembros de su redacción.
La caracterización de ese tiempo político como “bajo las fuerzas de ocupación” señalaba la intransigencia de sus posiciones. Según el testimonio de El Kadri, buscaban alimentar la “línea dura”, “chúcara” o “cañera”.
Por las acciones emprendidas por ese tiempo (asalto al vivac de la aeronáutica en Ezeiza) o por la idea de mostrar un espíritu de cuerpo, de “creación colectiva”, los artículos no llevaban firma.
Se trataba de piezas breves, de una o dos carillas, de características panfletarias o incendiarias, concluyendo con convocatorias a la lucha y el reclamo por el retorno de Perón. Las fuentes de información eran las que podían reunir por sus propios medios. Tomaban notas periodísticas del momento para comentar o criticar o recurrían a la Colección de Mundo Peronista para tomar elementos doctrinarios y luego desarrollar algún artículo sobre problemas de actualidad.
Según El Kadri, “lo voceábamos así: ‘Salió Trinchera de la Juventud Peronista: contra el gorilismo apátrida. Perón debe volver!’. O sea, que mientras lo voceábamos, ‘panfleteábamos’”.
En la redacción se contaba a Envar El Kadri, Héctor Spina, Gustavo A. Rearte, Felipe Vallese, Jorge Rulli, Alberto Brito Lima, Carlos Caride, Pocho Rearte, Luis Sansoulet, Lucía Aráoz de Lamadrid, Edgardo Lombardi, Osvaldo Agosto, Luis Galeano, Osvaldo Balzano, Marta Balzano, Tulio Ferrari, José Pignataro, José Mario Bevilacqua (Tito), Aída Rosa Filipini, Carlos Maldonado, Sergio Sánchez Bahamonde y Beatriz María Fortunato. Existe consenso en reconocer a Fortunato como principal responsable de la publicación.
La primera entrega de la publicación se agotó al ser distribuida en un acto de las 62 organizaciones gremiales peronistas en el Luna Park. La segunda entrega reivindicó la figura de José Mario “Tito” Bevilacqua, muerto mientras realizaba el servicio militar. En sucesivas entregas definieron las características de la “revolución”: popular y con la juventud como vanguardia; reproducían contenidos de mensajes de Perón o citas de Evita; homenajeaban a los fusilados; daban cuenta de las acciones de la JP; incluían notas de corte histórico revisionista; exaltaban el primer período del peronismo y execraban a la Revolución Libertadora; deslindaron posiciones con otros sectores y defendieron a los sindicalistas jóvenes como Di Pascuale que les ofrecían protección y espacios para reunirse; incluían apostillas sobre otros procesos revolucionarios.
Trinchera. N° 3, octubre de 1960.
A partir de la entrega 9 comenzaron a editar una sección especial para la denuncia de torturadores: “Bestias con jinetas”.
Una de las primeras víctimas de la aplicación del Plan Conintes fue Marcelo Medina: “Un hombre humilde y sincero, que había sido detenido por su fe peronista y su rebeldía ante la entrega del patrimonio nacional y la persecución del pueblo, salvajemente torturado…militaba en el Comando de la Resistencia ‘Capitán Costales’ (inmolado el 9 de junio de 1956 en Lanús) y , a consecuencia de las brutales torturas a que fuera sometido, falleció en la madruga del lunes 14 de marzo de 1960”.
En la entrega 11 recibieron el espaldarazo de Perón mediante el envío de una carta con fecha del 27 de abril de 1961: “Es excelente la idea de publicar el boletín ‘Trinchera’ de un gran contenido, muy bueno y útil para el peronismo. Me ha llamado la atención que en toda esa obra de la juventud no aparece un solo nombre de sus componentes, lo que indica que se trata de un cuerpo único, animado de la solidaridad y compañerismo que hace ‘uno para todos y todos para uno’, como regla en las consignas de los antiguos Caballeros de la Tabla Redonda. Los felicito porque con ello están dando un gran ejemplo a todos los peronistas, cuyos dirigentes tienen la falla de ‘aparecer más que ser’ o la de agruparse en círculos antagónicos que tanto mal le han hecho al Movimiento. En actualidad existen movimientos de la Juventud Peronista en casi toda la República. Únanse indestructiblemente y luego tomen todo en sus manos, que el futuro será de ustedes para bien del Peronismo”.
Escribía Rearte: “Sólo nos queda el camino de la violencia…y la historia nos enseña que la supervivencia del Pueblo está condicionada por la desaparición de la oligarquía. Renunciar a la lucha es renunciar al destino de la humanidad argentina por pura cobardía. Si la sangre los Gainza Paz, los Aramburu, los Rojas, los Lamuraglia, es el precio que exige la historia para que no se mueran de hambre nuestros changuitos, que su sangre sea derramada. No propiciamos doctrinas de odio, luchamos por una causa de amor cuyo objeto es el hombre americano. Por eso no daremos el alto final hasta que la infamia, el privilegio y el colonialismo no queden definitivamente borrados de esta tierra generosa”.
Trinchera. N° 12, Bs. As., octubre de 1961.
En su segunda etapa la dirección de la publicación fue llevada por Edgardo Lombardi y Carlos Caride, quien estaba preso. El Kadri quedó como referente y se encargaba del armado de la publicación. Ese desplazamiento en la dirección se produjo tras la expulsión del grupo Insurrección en el que se encotnraba Beatriz Fortunato.
Se imprimió en “offset”, permitiendo la reproducción de fotos y una mejor legibilidad de los textos. Pasó a formato carta, abrochándose al costado, con una tapa de papel de color azul. La calidad de los artículos mejora y son ilustrados con fotos o dibujos. La tirada oscilaba entre 700 y 1000 ejemplares. La venta fundamental se producía en actos sindicales, llevándose cada uno de ellos diez o veinte para cada barrio o comando.
En esta etapa se constituye como órgano del Movimiento de la Juventud Peronista de la República Argentina (MJP).
Continuaron utilizando la misma leyenda “editado bajo las fuerzas de ocupación”.
Salieron cinco números espaciados (diciembre 1963, abril 1964, mayo 1965, febrero 1966). Los artículos no llevaban firma.
A diferencia de la etapa anterior tiene proyección nacional incluyendo artículos de las provincias. Por esa razón, su tirada ascendió a los 5000 ejemplares.
El primer número llevaba en tapa la opción dilemática: “Perón o muerte” y se repartió en un acto de la CGT de diciembre de 1963, realizado en la Plaza Congreso. El segundo número del año 1964 se hace eco de la campaña por el regreso del líder: “Resistencia efectiva para la vuelta de Perón”. El último anunciaba “En pie de guerra junto a Perón”. Se intercalaban notas sobre la experiencia argelina, movimientos huelguísticos, denuncias de torturas, solidaridad con detenidos y acciones de la juventud.
Fuentes:
El Kadri, Envar. Testimonio en Burgos, Carlos. Prensa popular y revolucionaria argentina 1955-1975. Buenos Aires, Nuestra América, 2015.
Referencias:
Burgos, Carlos. Prensa popular y revolucionaria argentina 1955-1975. Buenos Aires, Nuestra América, 2015.
Carman, Facundo. El poder de la palabra. Buenos Aires, BN, 2015.
Ehrlich, Laura. Nacionalismo y arquetipo heroico en la Juventud Peronista a comienzos de la década del’60. En Anuario IEHS 28. Tandil, 2013.
Funes, Andrés. Una historia en incesante movimiento. La tradición peronista en Trinchera de la Juventud Peronista (1960-1963). En Izquierdas. Número 40. 2018,
Darío Pulfer