Villa Federal, provincia de Entre Ríos, 18 de abril de 1922 – Buenos Aires, 30 de julio de 1998).

Dirigente del gremio de trabajadores de la carne, participante activo del sindicalismo peronista.Su vida gremial se inició a los veinte años como delegado en el frigorífico La Blanca de la ciudad de Avellaneda. Adhirió al justicialismo desde su propio surgimiento –participó de la jornada del 17 de octubre de 1945-, en tantoque en 1947 formó parte del congreso fundacional de la Federación Gremial del Personal de la Industria de la Carne. Como secretario de prensa de la misma fundó el periódico El Trabajador de la Carne (1948). Entre 1949 y 1953 se desempeñó como Agregado Obrero en Bolivia, Polonia, Honduras y Chile. Luego del golpe de Estado de 1955 se reincorporó al trabajo en el frigorífico Anglo de Avellaneda.

A comienzos de 1957 representó a su gremio –era secretario de organización- en la Comisión Intersindical, agrupamiento que reunió a sindicatos peronistas, comunistas e independientes críticos del gobierno militar, y luego hizo lo propio en el Congreso Normalizador de la CGT, que se inició a fines de agosto de aquel año. Su actuación en el mismo fue destacada pues fustigó la política laboral del gobierno, desconoció la intervención de la central obrera, reclamó por los dirigentes inhabilitados y también por la derogación de la ley de Residencia. Pero sobre todo por reivindicar, por primera vez desde el golpe de Estado de 1955, la identidad peronista de los obreros al expresar que “los trabajadores hemos dado prueba de nuestra seriedad y de que estamos alcanzando nuestra plena madurez. Lo hemos demostrado en las gloriosas jornadas de octubre de 1945”.

El surgimiento de las 62 Organizaciones Gremiales como consecuencia del frustrado Congreso lo tuvo como uno de sus fundadores; en ese carácter integró la Mesa Coordinadora de la misma junto a otros dirigentes como Augusto T. Vandor, Amado Olmos, Miguel Gazzera y Sebastián Borro. Hacia fines de ese año participó del Plenario Nacional de Delegaciones Regionales normalizadas de la CGT y las 62 Organizaciones que se llevó a cabo en La Falda, provincia de Córdoba, que lo tuvo como uno de los oradores principales. A tono con el Programa aprobado en la reunión, de un fuerte contenido nacionalista y estatista que resumía las reivindicaciones y aspiraciones el sindicalismo peronista, Cardoso abogó por la participación de este último “en el proceso histórico nacional”.

Como integrante del Comando Táctico Nacional, fue uno de los encargados de difundir la consigna de votar por Arturo Frondizi en las elecciones de 1958.

En mayo de 1958 lograron recuperar el gremio, que estuvo intervenido durante el gobierno militar, formando Cardoso del grupo que se hizo cargo del mismo.

Cardoso al recuperar la Federación de la carne, saludado por afiliados.

A todo esto, debe decirse que estuvo al frente de su gremio entre 1959 y 1963, aunque su influencia en el mismo, desde distintos cargos, se extendió durante toda esa década.

En el transcurso del año 1960 planteó en reuniones de las 62 Organizaciones y de su sindicato la necesidad de moderar la protesta gremial frente al gobierno desarrollista y abogar por el  diálogo con el mismo, en un marco signado por los despidos de trabajadores de la carne y el eclipse de los grandes frigoríficos extranjeros. Este posicionamiento de Cardoso, conocido como “integracionismo”, le costó ser expulsado del movimiento justicialista y de las 62 Organizaciones, pero ambas sanciones fueron levantadas por el propio Perón, que se lo comunicó por carta fechada el 8 de julio de 1961.

En 1963 participó en representación de su sindicato del Congreso de la CGT que normalizó la central obrera, en el que fue electo José Alonso como secretario General. En 1966, al dividirse las 62 Organizaciones en “De pie junto a Perón”, encabezada por José Alonso, que proclama su lealtad incondicional al líder, y “Leales a Perón”, integrada por gremios vandoristas, formó parte de esta última.

Luego de esta escisión, el Congreso Ordinario de la CGT llevado a cabo en octubre de 1966, con mayoría vandorista, procedió a elegir como Secretario General de la central a Francisco Prado, de cuya comisión directiva participó Cardoso como Secretario de prensa, cultura y actas.

En 1968 la que se dividió fue la CGT, constituyéndose en consecuencia la CGT de los Argentinos, encabezada por el dirigente Raimundo Ongaro, y CGT Azopardo, vandorista, cuyo titular fue Vicente Roqué, de la que Cardoso participó como vocal de la comisión directiva.

En 1973-74 se desempeñó como delegado normalizador del partido Justicialista de la provincia de Mendoza y en 1975 como Director de Asuntos Laborales de la Cancillería. Durante la última dictadura militar trabajó en un puesto de diarios y revistas. Con el retorno de la democracia en 1983 fue designado asesor del Senado de la Nación en materia sindical. Hasta poco tiempo antes de su fallecimiento también fue asesor de ministerio de Trabajo.

Fuentes:

Diario El Día, La Plata, 31 de julio de 1998.

Referencias:

Dawyd, Darío. Sindicatos y política en la Argentina del Cordobazo. El peronismo entre la CGT de los Argentinos y la reorganización sindical (1968-1970). Buenos Aires, Pueblo Heredero, 2011.

Gasparri, Mario y Panella, Claudio. El Congreso Normalizador de la CGT de 1957. La resistencia obrera y el surgimiento de las 62 organizaciones. Buenos Aires, Corregidor, 2008.

James, Daniel. Resistencia e integración. El peronismo y la clase trabajadora argentina, 1946-1976. Buenos Aires, Sudamericana, 1990.

Rotondaro, Rubén. Realidad y cambio en el sindicalismo. Buenos Aires, Pleamar, 1971.

Senén González, Santiago y Ferrari, Germán. El ave fénix. El renacimiento del sindicalismo peronista entre la Libertadora y las 62 Organizaciones (1955-1958). Buenos Aires, Corregidor, 2010.

Claudio Panella