Después del golpe de Estado de 1955, Perón se exilió en Paraguay, Panamá, Venezuela y República Dominicana hasta asentarse en Madrid, España. En cada uno de esos lugares dedicó buena parte de su tiempo a leer y escribir cartas, con ayuda de sus secretarios y de su nueva parejaMaría Estela Martínez (Isabel).A la distancia, se valió de un complejo dispositivo de comunicaciónpara intentar sortear las dificultades de conducir un movimiento político amplio y diverso. Otras formas de comunicación fueron el telegrama, la llamada telefónica, la grabación de cintas magnetofónicas, además de las visitas que recibía en su residencia. En la correspondencia, son recurrentes las menciones a la necesidad de reorganizar la estructura orgánica del peronismo, sus diferentes ramas, los cuadros dirigentes, sus organizaciones sindicales, las dirigencias regionales, etc., así como la búsqueda por lograr mayor unidad de un peronismo cada vez más heterogéneo.

La distinción entre “conducción estratégica” (el “Comando Superior”), por un lado, ylos “comandos tácticos”, por el otro, le sirvió a Perón para asumir cierto control centralizado sobre el movimiento,concebido como totalidad orgánica, y a su vez contar conentramados directivos en Argentina capaces de actuar de manera descentralizada.

El engranaje de comunicación, en el que la correspondencia ocupó un lugar central, actuó como mediación entre la conducción estratégica y los comandos tácticos, más allá del nombre que asumieran los organismos en cada momento. También debe destacarse la función de los “delegados”, ya se los considere miembros del Comando Superior o de los dispositivos locales y tácticos: la escritura epistolar del líder exiliadoencuentraen ellos a sus interlocutores privilegiados. Otra figura a destacar es la de los mediadores o “correos” que, al visitar a Perón, llevaban y traían correspondencia.

En principio, como es usual con los acervos epistolares, las cartas originales conservadas suelen reposar en los archivos personales de sus receptores. Esto hace que la correspondencia enviada por Perón sea en algunos casos inaccesible o que su acceso esté supeditado a la voluntad de conservación o publicación por parte de particulares. Por otro lado, el archivo personal de Juan Perón conservado en Madrid tambiénha sido fragmentado. Al menos tressendas pueden ser identificadas, de las cuales dos desembocan en instituciones archivísticas de acceso público.

En primer lugar, mencionemos los“Juan Domingo Perón Papers” del Instituto Hoover, Universidad de Stanford, California. La institución comenzó a adquirir materiales relacionados con Perón a finales de los años cincuenta para una colección sobre Argentina, y sabemos que al comenzar la década del noventa todavía resultaba desconocido el archivo conservado en Madrid. Treinta años después, buena parte del material organizado en doce cajas está compuesto pordocumentos provenientes del archivo madrileño.

En segundo lugar, el fondo documental Juan Domingo Perón del Archivo Intermedio, Archivo General de la Nación, Argentina, contiene entre originales y copias un total de 26 cajas,cuyo contenido fue ingresado en 2015 proveniente dePresidencia de la Nación, luego de haber sido halladopor personal del Ministerio de Defensa en un edificio de la Fuerza Aérea.

La documentación contenida en ambas institucioneses variada e incluyefotografías, audiovisuales, papeles personales, entreotros soportes y objetos, aunque las cartas ocupan la mayor cantidad de espacio. Los tipos de correspondencia y de interlocutores resulta heterogénea: dirigentes peronistas y de otros espacios políticos, delegados de Perón y organismos colegiados del peronismo, sindicalistas, intelectuales, periodistas, militares, organizaciones políticas, gremialesy político-militares, figuras políticas extranjeras, familiares y particulares. Como es usual en los archivos personales, el conservado por Perón contiene más correspondencia recibidaque enviada. En el caso de esta última, se trata de copias y/o borradores y no siempre puede confirmarse su destinoo,en caso de haber sido efectivamente despachada, su contenido final. También fue incluida en ambos fondos correspondencia perteneciente a Isabel Martínez y a José López Rega, aunque desconocemos si su preservación en origen estaba integrada a la de Juan Perón.

En tercer lugar, es de considerar que una fracción inestimable de la correspondencia perteneciente al acervo de Madrid circula en manos privadas y es ofrecida a la venta por diferentes canales. En 2018una fundación presidida por Mario Rotundo vendió varios lotes en una subasta en Roma. Sin ser exhaustivos, el remate incluyó correspondencia de Perón con Arturo Frondizi, Rogelio Frigerio, Jorge Paladino, Jorge Antonio, Edgar Sá, y el Gral. Miguel Ángel Iñiguez. Otroslotes ofrecidos consistían decasetes, cintas audiovisuales, fotografías, agendas yobjetos personales de Perón, Evita e Isabel. No es la primera vez que Rotundo realizó subastas de bienes pertenecientes a Juan Perón, luego de haberlos recibido por donación de Isabel, siguiendo la supuesta voluntad de su esposo. También desde el archivo Hooverse afirma haber obtenido documentación a través de la compra directa a un particular.    

A los acervos documentales extraídos de Madrid se deben sumar los archivos privados de los correspondientes de Perón y la publicación de epistolarios, cartas o fragmentos realizada por editores, coleccionistas o personas interesadas en la difusión de fuentes históricas, tanto en formato papel como digital,en muchos casos sin criterio archivístico profesional. Cartas escritas por Perón han sido difundidas en diversos soportes y en compilaciones, pero también en publicaciones de la época. Algunas epístolas publicadas en prensa de la resistencia tuvieron repercusión,aunque en ciertos casos su autenticidad fue puesta en tela de juicio.

Aunque más conocida y completa es la correspondencia Perón-Cooke, también ha sido publicado parte del intercambio con Rogelio Frigerio, Pedro Michelini, Juan R. Garone y Bernardo Alberte, entre otros. Además, se publicaron antologías con correspondencia variada o libros editados por familiares, militantes políticos o dirigentes que accedieron a documentación personal.La producción basada en este tipo de fuentes éditas es profusa.De la correspondencia disponible en el Archivo Hoover, unas pocas cartas han sido editadas y publicadas como anexo en un libro que compila seis ensayos que se nutren de estas fuentes. Respecto de ambos archivosinstitucionales mencionados, es incipiente pero progresiva su consulta en sede académica y algunos resultados ya están siendo publicados.

La ampliación de líneas de investigación a partir de la abundante correspondencia contenida en estos archivoses inestimable. Además del estudio sobre trayectorias particulares, estas fuentes habilitan a un mayor conocimiento sobre los más variados temas de la historiografía peronista. Mencionemos algunos ejemplos sin pretensión de exhaustividad: la relación entre Perón y las diferentes ramas y órganos del movimiento, su reestructuración interna y el rol de los delegados; la comunicación con Perón, sus dificultades, la censura, la escritura en clave, la autenticidad de la palabra del líder; la búsqueda por establecer relaciones y acuerdos con otras fuerzas políticas y ampliar las bases de apoyo del peronismo; el impacto de procesos políticos transnacionales en sus transformaciones ideológicas e identitarias; el rol de la juventud; la evaluación de diferentes tipos de tácticas para luchar contra la proscripción y regresar al gobierno, como la insurreccional, la revolucionaria, la golpista y la político-electoral.

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Sergio Friedemann