(Capital Federal, 15 de julio de 1916 – 3 de febrero de 2022)

            Fue hija adoptiva del Coronel Manuel Antonio Rodríguez, militar que se desempeño como ministro de Guerra del gobierno del general Agustín P. Justo.

            Trabajó durante tres años en el área de archivos de la Sociedad de Beneficencia de la Capital Federal y se desempeño como visitadora médica hasta que fue designada secretaria del Servicio de Radiología del Hospital Rivadavia.

            En 1948 ocupó el cargo de Directora en el Hogar de Tránsito Nº 2 de la Capital Federal, dependiente de la Fundación Eva Perón, ubicado en la calle Lafinur 2988.

            Su labor se extendió hasta fines de ese mismo año, cuando Eva Perón la convocó para participar en la Conferencia Interamericana de Mujeres como Pro-secretaria y asesora de la delegación de la Republica Argentina. En dicha Conferencia se trataron todos los temas referidos a la participación de la mujer en la política a nivel continental, situación que planteó un giro en la vida de Ana al iniciar su actuación por el sendero de la política.

            En 1949 fue convocada para integrar la Asamblea General de Mujeres desarrollada en el Teatro Nacional Cervantes, donde nació el Partido Peronista Femenino.

            Para comenzar con la construcción del mismo, Eva Perón eligió a veintitrés delegadas censistas con el objetivo de realizar un censo nacional de mujeres peronistas e inaugurar unidades básicas femeninas en todas las provincias y territorios nacionales. Ana fue designada para trabajar en la provincia de Tucumán primero (1949), y posteriormente en la de Santa Fe (1950-1952), donde fundó 658 unidades básicas en dos años.

Ana Macri en Tucumán

            Por su ardua labor en el Partido, Eva Perón la incluyó en la nómina de candidatas a diputadas nacionales por la Capital Federal para las elecciones de noviembre de 1951, en la que por primera vez ejercieron las mujeres su derecho al voto. Resultó electa, integrando de ese modo el grupo de 23 mujeres que se convirtieron en legisladoras por primera vez en la historia parlamentaria nacional. Ejerció el cargo desde mayo de 1952 hasta septiembre de 1955.

            Tras el golpe militar que derrocó al gobierno peronista, fue encarcelada y confinada en la cárcel de Olmos, cercana a la ciudad de La Plata, transitando los años más duros de su vida pero sin claudicar a sus ideales que la mantuvieron fuerte para poder resistir a tan injusta situación.

            En 1958 fue liberada, reiniciando su actividad política pese a la proscripción del peronismo. Por directiva del general Perón formó parte del Comando Táctico del Movimiento Peronista durante una década, de 1958 a 1968.

            En estos años mantuvo correspondencia con el líder del movimiento, trabajando para su retorno al país junto a otras compañeras de lucha como Elena Fernicola y Mabel Di Leo.

            En 1968, distanciada del mayor Bernardo Alberte, entonces delegado de Perón, Ana decidió renunciar al Comando Táctico de la Resistencia, dando lugar a la participación de compañeras más jóvenes pero sin abandonar la causa peronista, brindando testimonio de su actuación en el movimiento y su lealtad a la conducción de Juan D. Perón.

Referencias:

Barry, Carolina. Evita capitana. El Partido Peronista Femenino, 1949-1955.Buenos Aires, Eduntref, 2009.          

Cipolla, Damian. “Historia de vida y militancia en el Partido Peronista Femenino. El testimonio de Ana Carmen Macri”.EnAnuario Instituto Nacional de Investigaciones Históricas Eva Perón, Buenos Aires, 2009.

Gorza, Anabella. “Mujeres y peronismo. Intentos de reconstrucción de una estructura político- partidaria (1958-1966)”, en XVI Jornadas Interescuelas/ Departamentos de Historia, Mar del Plata, Universidad Nacional de Mar del Plata, 2017.

Gurruchari, Eduardo. Un militar entre obreros y guerrilleros. Buenos Aires, Colihue, 2001.

Macri, Ana. Mi biografía política. Buenos Aires, Instituto Nacional de Investigaciones Históricas Eva Perón, 2005.

Damián Cipolla