(Buenos Aires Aires, 10 de mayo de 1920 – Buenos Aires, 11 de noviembre de 2021).
Apodo: “La Negra”. También conocida como Nélida De Miguel.
Su padre fue un militante socialista que se acercó al peronismo. Tuvo cinco hermanos.
Para 1945 estaba casada con De Miguel, tenían una hija y vivían en Entre Rios 2065. Al producirse el 17 de octubre se sumó a la marcha de trabajadores gasistas portando una bandera argentina. Esa adscripción temprana le valió la reasignación de tareas en el instituto Malbrán al organizar una cena de apoyo a la candidatura de Perón. Enterado de la situación Ramón Carrillo, intervino y fue presentada a Eva Perón, con quien comenzó a colaborar de inmediato.
Fue delegada censista en La Rioja y a partir de esa posición promovió la apertura de unidades básicas que desarrollaban acciones de formación profesional. Por su destacaba labor fue trasladada con la misma misión a Tucumán. Estas tareas causaron la separación de su esposo, con quien ya tenía dos hijas, aunque siguió utilizando su apellido.
Acompañó a Eva Perón en el último tiempo de su vida. Fue una de las mujeres elegidas por Perón para acompañar la cureña con el cuerpo de Evita.
El 4 de noviembre de 1953 fue designada por Perón como secretaria política del Consejo Superior del PPF. Integró la Comisión Nacional Pro Monumento a Eva Perón en representación del PPF. Fue electa diputada nacional en 1954. Estuvo a cargo de la Comisión de Relaciones Exteriores. Por esa condición, tras el golpe militar de 1955 tuvo pedido de captura al igual que el resto de los legisladores.
Con un grupo de mujeres se acercó a la CGT para pedir los restos de Eva Perón para evitar cualquier riesgo. Le aseguraron que estaban a salvo allí.
La casa de su madre fue allanada y al no encontrarla fue detenida su hermana. Se presentó ante la policía y fue llevada a las oficinas de la Secretaría de Inteligencia del Ejército frente al coronel Moori Koenig, quien había secuestrado el cadáver de Eva Perón tiempo atrás. Le dijo que no pesaban contra ellas cargos, pero que debía presentarse en Tucumán donde había desarrollado su accionar político. Allí fue detenida durante tres meses.
Liberada, se unió a las acciones de la resistencia peronista. Todavía en Tucumán, recibía de Buenos Aires, directivas y panfletos que se ocupaba de distribuir en la provincia.
Luego se trasladó a la Capital Federal y junto a un grupo de compañeras se ocupaba de confeccionar ropa para los presos y proveerles de asistencia alimentaria.
Se sumó a la barra en el Congreso Extraordinario de la Confederación General del Trabajo del año 1957, entonando las estrofas de la “Marcha Peronista” en abierto desafío a la intervención de Patrón Laplacette.
En 1959 formó parte de la marcha por las calles de Mataderos en solidaridad con la toma del Frigorífico Lisandro de la Torre.
Formó parte de la lista de diputados por la Unión Popular que llevaba como candidato a Andrés Framini para la gobernación de Buenos Aires.
En 1970, con el apoyo de varios sindicatos, empapeló la Capital Federal con un afiche con la pregunta “¿Dónde está el cuerpo de Evita?”.
Formó parte del charter de regreso de Perón a la Argentina en noviembre de 1972, a instancias de José I. Rucci con quien mantenía muy buenos vínculos. En marzo del año siguiente fue electa concejala por la Capital Federal.
En tiempos de la dictadura militar de 1976 se acercó a Deolindo F. Bittel e hizo gestiones por personas desaparecidas.
En sus últimos años de vida trabajó en una unidad de acción social de las 62 organizaciones peronistas.
Referencias:
Barry, Carolina. Nélida Domínguez Antonia. En Diccionario histórico del peronismo 1943-1955. Buenos Aires, Eduntref, 2022.
Darío Pulfer