
(Buenos Aires, 11 de julio de 1907 –Buenos Aires, 10 de mayo de 1957).
Fue empleado bancario. Trabajó en el Banco Central de la República Argentina.
Fue uno de los fundadores del Ateneo Bancarios Argentinos de Estudios Económicos y Sociales en 1945.
Se sumó al peronismo desde sus inicios. En 1947 participa de las primeras elecciones internas del Partido Peronista integrando la Lista Amarilla, que resulta ganadora, liderada por el Dr. Rodolfo Decker. A partir de ello, formó parte del Congreso Constituyente del naciente Partido Peronista.
En 1948 encabezó la lista de diputados nacionales por la Capital Federal para completar las vacancias en la Cámara al mismo tiempo que se elegían convencionales constituyentes. En 1949 accedió a una banca en la Cámara de Diputados de la Nación, en reemplazo de Elisardo Soneyra. Participó en la Comisión de Asuntos Municipales. Tuvo cuatro intervenciones parlamentarias.
Dirigía la revista Baluarte, que fue publicada entre 1949 y 1951, con propósitos de difusión doctrinaria.
En la década del ’50 fue Secretario General de la Seccional Buenos Aires y Secretario de Prensa del gremio bancario.
Con el golpe de 1955 sufrió la persecución por su condición de legislador. Tras la detención de John W. Cooke el Partido Peronista de la Capital Federal quedó a cargo de Raúl Lagomarsino y Alfredo Machargo. Según el testimonio de Vigo: “no obstante estar afectado de un grave mal, seguía entregado por entero a la causa de la emancipación nacional”. En ese momento fijó su centro de operaciones en un departamento en la zona de Palermo, propiedad de un joven de apellido Saponaro, ex chofer de Santin.
Fue descripto como un “caudillo de parroquia, sin mayor ilustración, ceceoso, atropellado para hablar, con folklórica tonada porteña…era querido en las barriadas porteñas” (Vigo, 1973: 108).
En ese momento consideraba que las acciones contra el gobierno militar debían fundamentarse en el aumento de las contradicciones internas entre las armas y el trabajo con los punteros barriales. Polemizaba con quienes sostenían el eje de trabajo en la fábrica para la organización de las tareas de la “resistencia”.
En su condición de representante del Partido Peronista de la Capital asistió a una reunión con Darío Alessandro que colaboraba con Francisco Capelli en la intervención del Partido Peronista a nivel nacional, con la finalidad de unificar las posiciones de ambas instancias y presentar una voz pública reivindicando al peronismo proscripto. Poco tiempo después fue detenido. Corría el año 1956.
Fue acusado de “asociación ilícita” y “atentado a la seguridad del estado”, recibiendo una condena a prisión por doce años.
Murió en la prisión en mayo de 1957. Fue en la cárcel de la Penitenciaría de Villa Urquiza, Mendoza 2260. Aunque hay controversias sobre las razones de su fallecimiento, ya que sufría una enfermedad, según Juan M. Vigo fue “víctima, más que nada, del trato infame que recibió en la prisión”.
El órgano oficial del Movimiento Peronista, Línea Dura, daba cuenta de un homenaje realizado cuando se liberalizaban las condiciones políticas en el país:
“Se realizó días pasados un justiciero homenaje a Alfredo Machargo, compañero de causa, muerto en la cárcel de esta dictadura en la que han militado los sicarios y los torturadores. Habló el compañero Mele destacando el valor y el fervor peronista de Machargo, sumado al martirologio del Pueblo, ya que, en su triste paso por el poder, la antipatria con su despiadada agresión no hizo sino dar mártires a nuestra causa. En nombre de los familiares agradeció el conmovedor acto recordatorio el compañero Bermúdez. Alfredo Machargo que vio concluir sus días en la prisión, condenado y torturado por la tiranía, seguirá siendo nuestro compañero de lucha en la rememoración constante y en el justo reconocimiento de sus valores. Su nombre se ha inscripto en el corazón de los peronistas: no habrá para un hombre de nuestro Movimiento otro laurel más preciado. Desde el exilio, John William Cooke hizo llegar sus expresiones de adhesión al homenaje en memoria del compañero caído en la lucha por el Pueblo” (Línea Dura, Número 17, 21 de abril de 1958).
En la actualidad es considerado el primer trabajador bancario mártir de una dictadura.
Fuentes:
Línea Dura. Número 17, 21 de abril de 1958.
Referencias:
Aelo, Oscar; Muñoz, Karina. Baluarte. Un proyecto militante (1949-1951). En Korn, Guillermo; Panella, Claudio. Ideas y debates para la Nueva Argentina. Revistas culturales y políticas del peronismo (1945-1955). Buenos Aires, Edulp, 2018. T IV.
Fernández, Andrés. Historia del origen de la doctrina y el partido peronista. Buenos Aires, Dunken, 2025.
Vigo, Juan M. La vida por Peron. Crónica de la resistencia peronista. Buenos Aires, Peña Lillo, 1973.
Darío Pulfer