
(Avellaneda, Provincia de Buenos Aires 29 de julio de 1921–Buenos Aires, 1 de julio de 2005).
Su padre Guillermo Alberto Kelly Sáenz era médico, de origen irlandés. Estuvo en el sur, destinado al hospital que luego se integró a la Marina de Guerra, tocándole atender el penal de Ushuaia. Era de orientación radical. Su madre María Rosa era de origen español.
Cursó en el Colegio La Salle de Buenos Aires, aunque no finalizó sus estudios secundarios. Su padre murió cuando era menor, en 1935.
Junto a su hermano Enrique Alberto abrieron una cartonería que bautizaron “San Patricio”, que funcionaba en Carlos Pellegrini 671.
A los veinte años ya estaba casado con Beatriz Rodríguez. En 1943 nació su hija Martha Beatriz.
Desde ámbitos que cruzaban nacionalismo y catolicismo se acercó a la Alianza Libertadora Nacionalista, en la víspera del golpe militar de 1943.El 3 de junio se sumó espontáneamente a una marcha que vivaba la consigna “Patria sí, colonia, ¡no!”, terminando preso. Fue liberado gracias a la gestión del Almirante León Scasso.
En 1946 fue nuevamente detenido por el asalto a una casa de armas. Fue expulsado de la Alianza Libertadora Nacionalista por esta razón. En 1948 tuvo una condena por la sustracción de una pistola de una armería.
En 1951, intentó desplazar a Juan Queraltó de la conducción de la Alianza Libertadora Nacionalista y terminó preso. Ese año se separó de su esposa.
Estuvo en Bolivia, invitado por el Movimiento Nacionalista Revolucionario de Paz Estenssoro y Siles Suazo.
El 15 de abril de 1953, finalmente, Kelly tomó el control de la Alianza Libertadora Nacionalista, con el apoyo del Ministerio del Interior a cargo de Ángel Borlenghi. El 19 de abril la decisión fue hecha pública a través de un comunicado oficial de la ALN en el que repudiaban «todas las formas de nacionalismo extranjerizante, y, muy especialmente, a aquellos atados a odios raciales y religiosos».
Después de ello, según sus palabras, se dedicó a “desinfectar” la organización de los elementos “nazis” y a “peronizar” sus actividades. Disolvió el “Comando Nacional” y expulsó a los hombres de la “vieja guardia” aliancista.
Para dar un giro definitivo a su perfil, en el año 1954, le cambió una vez más el nombre a la organización: Alianza Popular Nacionalista.
Configuró un grupo más pequeño al interior de la organización que denominó Comando Nacional Anticomunista. En ese núcleo revistaban: Mario Humberto Alcántara, Américo Torralba, Oscar Maceira, Sebastián Leprato, Néstor Sansiñeña, Oscar Louzán, Miguel Swec, Jorge Cesarsky, Víctor Sapienza, Lapellegrina, Federico Wichman, Guillermo Caballé y Héctor Luis del Río.
Junto a ese grupo actuaban patrullas de choque que salían a la ciudad en dos turnos (mañana y tarde) para intervenir ante el menor atisbo de oposición al peronismo. En la base contaban con militantes en gremios, colegios y facultades.
En enero de 1955 viajó a los Estados Unidos. Se entrevistó con Barón Ben Weiser de la Agencia Judía Mundial, con la intencionalidad de mostrar que el peronismo no albergaba posiciones antisemitas.
Tras el golpe de 1955 el local central de la ALN, sito en San Martín y Corrientes, fue defendido por grupos de militantes. El 17 de septiembre escuadrones de la ALN chocaron con grupos de la Federación Juvenil Comunista. Kelly fue detenido y llevado a la Penitenciaría de la calle Las Heras por miembros de los Comandos Civiles.
El local de la Alianza quedó bajo la custodia de Américo Torralba. El grupo fue intimado a desalojar el lugar telefónicamente. El día 21 dos tanques Sherman derribaron el edificio en el que funcionaban, causando destrozos en las inmediaciones.
El encarcelamiento de Kelly duró más de un año y medio. A partir de allí hubo un desperdigamiento de los cuadros nacionalistas.
Fue juzgado por una comisión investigadora en la que actuaba como fiscal Próspero Fernández Albariño, alias “Capitán Gandhi”
El 6 de enero de 1956 fue trasladado al reabierto penal de Ushuaia. Las condiciones de detención resultaban muy duras. Compartía esa situación con Héctor Cámpora, Oscar Albrieu, Alejandro Leloir, John W. Cooke, Oscar Nicolini, entre otros. Con motivo de los hechos de junio de 1956, sufrieron amenazas y simulacros de fusilamientos.
A fin de año, un grupo más chico, fue trasladado al penal de Río Gallegos.
En marzo de 1957, Kelly junto a Cámpora, Cooke, Antonio, Gomis y Espejo logró escapar de la cárcel de Río Gallegos. Se desplazaron hacia Chile. Fueron detenidos en la penitenciaría de Santiago. Fueron procesados. Todos los prófugos fueron sobreseídos, con excepción de Kelly sobre quien pendía una pena en la justicia argentina por un homicidio de un sereno de un local del PC de apellido Blanco. Mientras estaba detenido colaboró con el líder del Comando Chile y delegado de Perón, John W. Cooke. Alentaba el trabajo de grupos que seguían considerándose aliancistas: radios clandestinas desde Chile, ingresos a la Argentina para inspeccionar, traslado de materiales explosivos, reproducción de volantes y mensajes. También diseñó una magna operación insurreccional para el último trimestre de 1957, que llevaba el nombre de “Belfast” y que finalmente no fue desplegada.
Chile le negó derecho de asilo. En septiembre de 1957, en el momento que iba a ser extraditado, logró huir de la cárcel disfrazado de mujer, contando con la colaboración de la escritora Blanca Luz Brum y su hija. Por más de dos meses estuvo refugiado en distintos lugares: una jaula del zoológico, la chimenea del juez que lo condenó o lugares de resguardo. Sustrajo una sotana a un sacerdote con la que logró caracterizarse para burlar la vigilancia que caía sobre su persona. Para viajar usó la identidad “Doctor Vargas, psicoanalista”.
Kelly se trasladó a Caracas. Estuvo junto a Juan D. Perón cuando se produjo la revolución contra Pérez Jiménez y debieron trasladarse a Ciudad Trujillo.
Volvió al país en 1958. Aunque tenía pedido de captura, en tren de provocación, se sacó una foto en la Plaza de Mayo y otorgó una entrevista periodística. Su fama como hombre de armas llevar y poco disciplinado se confirmaron cuando un grupo de hombres bajo su orden atacaron la sede del Comando Táctico Peronista.
Fue detenido a mediados de 1958 y encarcelado en Ushuaia, donde permaneció hasta la amnistía otorgada por el Gobierno de Arturo H. Illia. En ese momento se propuso relanzar la Alianza. Formó un nuevo estado mayor con hombres jóvenes que habían actuado en distintos grupos nacionalistas: Miguel Sued (33 años); Humberto Guido (28 años); Fino Fontaiño (30 años); Ricardo Orlo (24 años, a cargo de la Juventud del movimiento); Roberto Medela (28 años); Salvador Catalona (42 años, gremialista, con actuación en la Unión Tranviarios Automotor) y José de Bandi (45 años, viejo activista nacionalista).
En libertad, comenzó a publicar el periódico Marchar, tomando distancia de sus antiguas creencias. Viajó a Israel.
En 1968 fue nuevamente preso por insultar a Pedro Eugenio Aramburu en un acto.En 1973, en el momento del retorno del peronismo al gobierno, volvió a publicar un periódico con noticias escandalosas.
En 1976 se radicó en Estados Unidos, donde publicó un periódico con el nombre Argentina, en el que buscaba apoyar la imagen del gobierno militar en ese país. El apoyo económico para esa empresa se originaba en sectores militares de la marina. El financiamiento se interrumpió por decisión de Emilio Massera, quien consideró que el trabajo de Kelly era contraproducente.
Regresó al país y consiguió apoyo de otros sectores militares contrarios a Massera para publicar Quorum en 1982. Desde allí denunció las actividades de la logia Propaganda Due, involucrando a Massera y Suárez Mason en la misma. A mediados de 1983 fue secuestrado por Aníbal Gordon, como parte de las intimidaciones del gobierno militar de Reinaldo Bignone.
En 1991, bajo el gobierno de Carlos S. Menem, tuvo un programa televisivo que llevaba como nombre Sin Concesiones. Fue levantado del aire tras haber insinuado que trataría el tema de la adopción de los hijos de Herrera de Noble.
Kelly falleció en 2005 en el Hospital Alemán de la Capital Federal víctima de un cáncer.
Fuentes:
Primera Plana. Nacionalistas. Otra vez las siglas ALN en las calles. 4 de febrero de 1964.
Referencias:
Cooke, John W. Correspondencia Perón-Cooke. Buenos Aires, Colihue, 2007.
De Dios, Horacio. Kelly cuenta todo. Buenos Aires, Gente, 1984.
Darío Pulfer